Considerado una profecía mesiánica, el versículo de Isaías 9:6 está en el centro de atención en los debates bíblicos.
Es una de las citas principales para los creyentes que defienden la doctrina de la trinidad. Pero hay un problema tanto de traducción como de interpretación. Sobre todo, hay una falta de comprensión de lectura.
Dos preguntas clave:
- ¿El texto de Isaías 9:6 dice que se le dará varios nombres al hijo? No. El texto dice que se le dará un nombre.
- ¿Quién le dará ese nombre según el contexto? El mismo que da el niño de “niño nos es dado”.
ANÁLISIS DE ISAÍAS 9:6 POR FRASES
ISAÍAS 9:6 (Isaías 9:5 en la versificación hebrea)
Porque un niño nos es nacido
כִּי־יֶ֣לֶד יֻלַּד־לָ֗נוּ
Ki-yeled yulad-lanu
- A nosotros nos han nacido un niño.
- Hay un niño y nosotros.
De ese niño se dice lo siguiente:
Un hijo nos es dado
בֵּ֚ן נִתַּן־לָ֔נוּ
Ben nitán-lanu
Un hijo es dado a nosotros.
- Hay un hijo.
- El que ha dado ese hijo.
- Y nosotros.
Y el dominio estará sobre su hombro
וַתְּהִ֥י הַמִּשְׂרָ֖ה עַל־שִׁכְמ֑וֹ
Vathí hamisrah al-shijmó
El dominio es algo que le es inherente. “Vathí” significa que ese dominio existe allí, en su hombro.
Será llamado su nombre
וַיִּקְרָ֨א שְׁמ֜וֹ
Vaiqrá Shmó
Hay uno que da el nombre. El mismo que ha dado el niño a nosotros.
Es un nombre. No son los nombres. Se trata de solamente un nombre.
El que da el nombre
De ahí que, aquel que da el nombre al niño es el Admirable consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno.
El nombre que da
Y el nombre que Él da al niño es “Príncipe de paz”.
CONCLUSIÓN
Porque un niño nos es nacido, un hijo nos es dado; y el dominio estará sobre su hombro. Será llamado su nombre por el Admirable Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno: “Príncipe de paz”